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lunes, agosto 29, 2005

Respuesta al comunicado de la defensoría indígena Wajxaqib' No'j sobre la homosexualidad

Por Ánchel Conte Cazcarro - Barcelona, 29 de agosto de 2005

Ante el indignante Comunicado del 6 de julio dirigido a la comunidad internacional por la Defensoría Indígena Wajxaqib’no’j sobre el tema gay en Guatemala vale la pena hacer una reflexión serena y distante. Cuando lo leí sentí un escalofrío de terror y una rabia infinita; miles de preguntas sin respuesta se me atoraban en el cerebro y la indignación crecía a cada interrogante que tenía que cerrar sin una posible explicación. ¿Cómo se puede ser tan vil, tan manipulador, tan ignorante y a la vez tan pedante, tan insolidario, tan integrista religiosamente y tan reaccionario en lo político? ¿Cómo quien se considera heredero de un pueblo milenario puede llegar a traicionar a ese mismo pueblo con un pensamiento cuyo fundamento está, no en el pensamiento maya, sino en las corrientes integristas cristianas impuestas por los colonizadores, primero, y por los misioneros yanquis después? ¿Cómo quien dice luchar por la libertad recurre a un discurso que sólo es posible encontrar en los documentos de partidos de extrema derecha y de ideología nazi? ¿Cómo nadie, incluido Wajxaqib’no’j, puede arrogarse la representatividad de todo un pueblo desconociendo la propia realidad histórica y actual de ese pueblo cuando es capaz de ignorar la existencia de homosexuales en su seno? ¿Cómo alguien que se pretende culto desconoce, o quiere desconocer, que la homosexualidad ha estado presente en todos los pueblos y en todas las civilizaciones de la Historia, gozando, incluso, de prestigio en algunas culturas de gran nivel, también en el continente americano? ¿Cómo se atreven a hablar de paridad de género en las comunidades indígenas? ¿De verdad creen que la mujer ocupa el papel que en justicia le corresponde? ¡Qué manera de cerrar los ojos ante una realidad hiriente y qué gran ejemplo de manipulación y demagogia! A fuerza de idealizar lo propio, lo único que consiguen es falsear la realidad, tergiversarla, deformarla y manipularla ¿Creen que con esos planteamientos pueden, realmente, dignificar y dar a los indígenas el papel protagonista que han de tener en la sociedad guatemalteca? Pues creo que no: todo lo que no arranca de la pura realidad está condenado al fracaso. ¿Realmente son ustedes solidarios con sus gentes cuando rechazan y niegan el derecho a ser lo que es a cualquier homosexual indígena? Porque señores, en sus comunidades, por ley natural, habrá el mismo porcentaje de homosexuales que en el resto del mundo; en eso, como en tantas otras cosas, ustedes no difieren del resto de la humanidad. ¿Y por qué son tan hipócritas? Cuando hablan de “defecto” para definir la homosexualidad ¿no están pensando en enfermedad, en degeneración, en vicio? No sean hipócritas, por favor, porque ese es el concepto que tienen de los homosexuales cuando los equiparan a asesinos, a ladrones, a narcotraficantes, etc. ¿A qué científicos recurren ustedes para cimentar sus tesis sobre la homosexualidad?
Ha pasado tiempo desde la primera lectura. Se serenó el ánimo; se serenó, que no quiere decir que se rindió. Y después de muchas lecturas del documento el gesto de rabia ha sido sustituido por una sonrisa que, acaso, sea muy cínica. Las preguntas sin respuesta siguen siendo las mismas, pero cada vez tengo más claro que ese comunicado tiene una voluntad manipuladora vergonzante. El movimiento indigenista, como todo el movimiento popular guatemalteco, tiene más cosas que plantearse que la cuestión homosexual, pero no puede decirse que no sea una cuestión que también ha de estar presente en el proceso de luchas reivindicativas, si es que se quiere una Guatemala donde los individuos sean respetados en su individualidad, en su persona, en sus opciones políticas, religiosas, sexuales, etc. El documento que comentamos no sólo no quiere asumir ese tema, sino que insulta a quienes somos homosexuales o a quienes luchan para lograr la libertad de una minoría perseguida durante siglos, acosada, obligada a vivir en una continua clandestinidad cuando su único “pecado” es amar a un ser del mismo sexo. Señores de Wajxaqib’no’j, están en un error si ignoran eso, aunque vuelvo a decir que no creo que haya error, sino una consciente teoría sobre la homosexualidad, a la que, según ustedes, no vale la pena prestar atención con la excusa de que hay temas más importantes que solucionar y porque ése es un “vicio” que ha llegado a Guatemala desde el exterior y del se ven libres los verdaderos indígenas, aquellos que no han sido contaminados por las corruptas ideologías dominantes en el mundo. ¿De verdad son tan cínicos como parecen?

O quizás no sea un error, ni ignorancia, ni una metedura de pata. Releyendo con atención el documento salta a la vista una voluntad manifiesta de manipular la historia, su propia historia, ésa de la que se sienten tan orgullosos. Cada lectura que hago me parece estar oyendo más la voz, no de un maya, sino de un representante de cualquier iglesia cristiana integrista: podría ser el mismísimo Bush, o el genocida Rios Montt, o un inquisidor del siglo XVII, o la oscura y cavernícola voz de los sectores más integristas del catolicismo, o cualquier telepredicador de vía estrecha. Sí, no les extrañe lo que les estoy diciendo: en la cuestión gay ustedes están más cerca de todos ellos de lo que se piensan; es más, coinciden plenamente con sus planteamientos. O quizás su defensa de lo indígena, de su historia, de su secular explotación y marginación la solucionarán con políticas, como antes les decía, de extrema derecha o filonazis. Tampoco se me extrañen con esto, amigos; un discurso tan encendidamente homofóbico y tan autocomplaciente con uno mismo sólo es posible oirlo en boca de personajes como el ya mencionado Bush, en el fascista francés Le Pen o en grupos neonazis, porque ni siquiera la derecha más conservadora es capaz de semejante disparate. Ustedes con insultar a todos los políticos creen que ya han cumplido; en eso también recuerdan a la extrema derecha, que niega legitimidad y valor a los partidos políticos. Si ustedes algún día tuvieran el poder sería para echarse a temblar.

Creo que han de hacer una reflexión. Y ojalá que el movimiento social guatemalteco les obligue a ello, que respuestas magníficas y sosegadas como
la de Colectiva de Lesbiana Liberadas LESBIRADAS les lluevan para que se den cuenta del daño que han podido hacer, no ya al movimiento de liberación homosexual, sino al movimiento por la paz y por la libertad en su país. Y, por favor, no hablen en nombre de su pueblo diciendo que los gay ayudamos a la descomposición social, porque si lo dicen excluyen de la lucha a todos los homosexuales guatemaltecos, a los que ustedes parecen ignorar y, lo que es peor, despreciar e insultar. Los homosexuales, como el resto de los mortales, actuamos según nuestras creencias e ideologías; unos estarán en la lucha y otros tranquilamente en sus casas, pero lo que sí es seguro es que ustedes se han ganado la antipatía de todos y de quienes sin ser homosexuales nos tienen a su lado trabajando codo con codo. Háganse un buen examen de conciencia, recuperen la verdadera historia maya y no intenten reinventarla tomando como fuente, precisamente, a quien más contribuyó a su persecución y casi aniquilamiento: la religión cristiana, porque, de verdad, leer su comunicado es como leer un documento parido por la más integrista mente cristiana.

Yo he leído algunos documentos suyos y hasta hoy me ofrecían cierta confianza. Ahora, mientras no demuestren lo contrario, me parecen, más que un movimiento defensor de los indígenas, un movimiento aliado del integrismo cristiano y de la mentalidad autoritaria de la derecha más reaccionaria. No utilicen sus argumentos si quieren que realmente los consideremos una “defensoría indígena”. Y eso por el bien del movimiento popular guatemalteco. La disculpa que hicieron pública suena tan falsa y tan oportunista que nadie pueda creerla sincera, no es más que un intento de echar un cubo de agua sobre el incendio que provocaron. Han de dar una respuesta sólida y argumentada al reconocer su error. Mientras eso no llega, mis dudas sobre lo que ustedes son y lo que representan seguirán vivas.


- Comunicado que diera origen a la presente respuesta

- Comunicado de la Colectiva de Lesbianas Liberadas

www.albedrio.org

lunes, agosto 22, 2005

El león de Quetzaltenango

Por Jaime Barrios Carrillo - Estocolmo, 22 de agosto de 2005

Guatemala es como una enorme jaula de hambrientos. El hambre produce violencia, pero ante todo mata. Los símbolos entonces se rebelan. En una fábula memorable, fray Matías de Córdoba cuenta La tentativa del león. Fray Matías utiliza la figura del león para retratar la soberbia y el afán de poder que fracasan ante el triunfo final de la razón humana. Qué lejos estaba aquel fraile escritor y patriota de imaginar un país guatemalteco donde las autoridades pierden ahora fácilmente la razón.

La deshumanización de Guatemala afecta también a los animales. A las mal llamadas bestias (debería ser lo contrario) que nada han hecho al ser humano.

La muerte de Kero, el león literalmente muerto de hambre en Quetzaltenango, es una abominable muestra de la desidia de las autoridades del zoológico y de la irresponsabilidad municipal. Pero también resulta una alegoría de todo el país.

Si los niños se mueren de hambre en Guatemala (47 mil al año, según Andrés Botrán, titular de la Secretaría de Seguridad Alimentaria), qué podía esperar un pobre león africano, condenado de antemano a la inanición en un zoológico quetzalteco. Tras las rejas guatemaltecas nadie está seguro.


El asesinado abogado laboralista Mario López Larrave solía señalar, como algo patético, que los animales habían tenido primero una ley protectora en Guatemala, antes de que los trabajadores. Mas ahora ni los animales están seguros en un país donde la inseguridad es un estado estructural.


Los chivos en este caso deben poner las barbas en remojo. Repensar el incidente dentro de la situación general del municipio y del país. Resulta además paradójico si se toma en cuenta el símbolo del "león de Quetzaltenango".


Recordemos que en 1910 fue levantado un monumento al león, por el arquitecto Carmen Rimola Rubini, en honor al tirano Manuel Estrada Cabrera.
Curiosamente el león, además de punto de referencia, se convirtió después en un símbolo de la democracia, y de haber sido un monumento a un dictador pasó a ser un homenaje a las víctimas de la dictadura. El león se convirtió en símbolo de la fortaleza altense. El monumento fue cambiado de lugar varias veces. Originalmente levantado en la Quinta del Bosque, fue ubicado en 1950 en el barrio de La Democracia en la zona 3, en el parque Benito Juárez. Se dice que el monumento del león de La Democracia molestaba a la dictadura militar durante los años de conflicto armado y en los 80 fue trasladado al Cantón Las Rosas, a la entrada de la ciudad, en un lugar bastante discreto.

En todo caso el león chivo ya no es como lo pintan. La muerte final de Kero tras las rejas resulta una especie de "limpieza animal" por no decir "social". Un león muerto de hambre, como acabada fortaleza y ex símbolo de la democracia de Quetzaltenango y por añadidura del país.

Fuente:
www.sigloxxi.com - 210805

martes, agosto 16, 2005

El Estado pedirá perdón a familias

Por: Martín Rodríguez P. - Guatemala, martes 16 de agosto de 2005

En semanas como éstas, de agosto, pero en 1989, fueron desaparecidos 11 estudiantes “en un operativo de inteligencia militar, con participación de agentes del Estado”. Ahora, 16 años después, el Estado pedirá perdón a sus deudos.

“La petición de perdón ya fue decidida. Será en agosto o septiembre, y aún está pendiente determinar si será pública o privada, qué funcionario participará y el resarcimiento”, anunció Frank La Rue, de la Comisión Presidencial para los Derechos Humanos (Copredeh).

El agosto de 1989 hubo lluvia y muertes políticas. Esa ola de represión empezó el 15 de ese mes —como ayer—, con bombas a las sedes del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), la Rectoría de la Universidad de San Carlos y las Brigadas de Paz.

Seis días después empezó la represión contra integrantes de la Asociación de Estudiantes Universitarios (AEU).

“Once estudiantes universitarios fueron detenidos (...). De ellos, seis fueron torturados y ejecutados, y hasta la fecha no han aparecido las otras cinco víctimas”, dijo la Comisión de Esclarecimiento Histórico (CEH) en sus conclusiones sobre el caso.

La petición de perdón no será, como en otras ocasiones, por una resolución de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), sino por una negociación amistosa entre el Gobierno y los familiares de las víctimas.

Mario Polanco, del GAM, quien estudió junto a los desaparecidos, señaló que la petición de perdón no basta, sino que se exige justicia y resarcimiento.

Esperan que la CIDH se pronuncie sobre el caso y, junto a los familiares, quieren llevar el caso a la justicia española.

Lista de víctimas

Estos son los nombres de las víctimas del último secuestro masivo durante el conflicto armado interno.

Iván Ernesto González, 29, Psicología.

Carlos Ernesto Contreras, 22, Psicología.

Hugo Leonel Gramajo, Ciencias Políticas.

Silvia María Azurdia, 29, politóloga y psicóloga, y su esposo Víctor Hugo Rodríguez, 35, politólogo y licenciado en Relaciones Internacionales.

Aarón Ubaldo Ochoa, 27, Sociología.

Mario Arturo de León, 27, Agronomía.

Carlos Leonel Chutá, 31, estudiante, y Carlos Humberto Cabrera, 46, maestro y estudiante de Humanidades.

Eduardo López Palencia, 26, Química.

Marco Tulio Montenegro, estudiante.


Fuente : www.prensalibre.com

lunes, agosto 08, 2005

Unión Tenebrosa

Por la redacción de La Hora - Guatemala, 8 de agosto de 2005

Si los usuarios de las empresas eléctricas Deorsa y Deocsa tuvieran que bautizar a la empresa matriz dueña de ambas comercializadoras, seguramente que en vez de hablar de Unión Fenosa tendrían que hablar de Unión Tenebrosa, sobre todo luego de que los personeros de ese consorcio español tranquilamente mandaron al chorizo a la Comisión de Energía del Congreso de la República, negándose a informar sobre las graves deficiencias en el servicio que agobian a muchos usuarios porque los cortes en el suministro son constantes, los cobros exagerados y la atención al público inexistente.

Unión Fenosa dice que siendo ellos una empresa privada no tienen por qué atender citaciones que les hagan los diputados, pero pasan por alto que están prestando un servicio público y que, por lo tanto, están sujetos a la legislación guatemalteca. Al respecto vale la pena recordar a los españoles que dirigen esas empresas y a los guatemaltecos que trabajan para ellos, que la Constitución establece que el Estado tiene la obligación de la defensa de los consumidores y usuarios en cuanto a la preservación de la calidad de los productos para garantizarles su salud, seguridad y legítimos intereses económicos. Ello para no decir que también tiene la obligación de impedir el funcionamiento de prácticas excesivas que conduzcan a la concentración de bienes y medios de producción en detrimento de la colectividad, según reza textualmente la Constitución. Además, el artículo 120 faculta a la intervención de las empresas que prestan servicios públicos esenciales para la comunidad y esa norma constitucional está sobre la Ley General de Electricidad y por lo tanto los señores de Unión Fenosa deben abandonar esa actitud tenebrosa de reírse del Estado de Guatemala porque puede ser que este pueblo de indios les resulte respondón a quienes ahora en vez de espejitos entregan facturas por kilovatios no proporcionados con el mismo efecto de llevarse la riqueza del país, aumentando las desgracias de poblaciones eternamente empobrecidas.

Justamente los abusos cometidos por concesionarios en el siglo pasado dieron lugar a la era de las nacionalizaciones de servicios, puesto que esa prepotencia de quienes chantajean con la amenaza de que se ahuyentará la inversión extranjera se traduce en perjuicio para la sociedad. Y como toda acción trae reacción, así como tras la corrupción en empresas públicas vino la ola de privatizaciones, el abuso de las empresas privadas traerá tarde o temprano políticas en dirección contraria, cabalmente porque empresarios voraces como los de la tenebrosa empresa no entienden que no puede abusarse impunemente ni esquilmar sin consecuencias al pueblo. Si se pide respeto a la libertad empresarial, tiene que haber también respeto al derecho del consumidor.

Fuente:
www.lahora.com.gt - 050805

lunes, agosto 01, 2005

Unidad frente a la adversidad

Por Miguel Ángel Albizures - Guatemala, 1 de agosto de 2005

Los conflictos no son malos cuando se ven como oportunidad para avanzar.

Los problemas del país son graves, afectan a la sociedad en su conjunto, y los movimientos indígenas, de derechos humanos, campesinos o sindicales, no deben ignorarlos ni, mucho menos, meterse zancadillas entre ellos mismos, o buscar la forma de lincharse políticamente. Los grupos oscurantistas que aún existen en el país han de estar felices de que las organizaciones se destruyan entre sí, pues su objetivo ha sido debilitarlas, inmovilizarlas o mediatizarlas frente a la problemática nacional.


Éstos son momentos de búsqueda de los puntos que les unen, la participación en ciertos espacios no es gratuita ni nace del corazón de las altas autoridades, son fruto de la presión social, de la protesta y de la propuesta, pero también del legítimo derecho de participación ciudadana para la construcción de la democracia y del Estado Democrático de Derecho que anhelamos.


Las diferencias, por grandes que sean, no son insalvables, todos, indígenas o mestizos, sufrimos las consecuencias de la guerra sucia que se libró en el país. Fuimos partícipes, en una u otra forma, de la búsqueda y construcción de los acuerdos de paz y exigimos la elaboración de un Plan Nacional de Resarcimiento en beneficio de las víctimas, sin distinción de ninguna clase. Que hubo genocidio nadie lo puede negar. Que se realizaron ejecuciones extrajudiciales, es innegable. Que continúa la búsqueda de desaparecidos, es un hecho. Que sigue la excavación en cementerios clandestinos, seguro, y que todos queremos proteger los archivos que recién han sido descubiertos es una realidad, porque en ellos se puede encontrar parte de la verdad del holocausto acontecido en Guatemala.


Los representantes de la sociedad civil en la Comisión Nacional de Resarcimiento (CNR), no pueden seguir perdiendo el tiempo en divisiones internas y en pugnas políticas o personales, retrasando la implementación del PNR. El problema de fondo es político, son luchas de poder en medio de las cuales hay tanto intereses personales como de grupo que deben deponerse. Quienes acusan de racismo o discriminación saben perfectamente que no es ése el fondo del problema, y quienes son acusados saben que ésa es la forma en que les pueden deslegitimar.


Siempre cuesta tomar conciencia de la magnitud de los desastres; algunas veces es demasiado tarde, otras oportuna y logramos salvar vidas. Ojalá y en esto que acontece, logremos salvar organizaciones y espacios políticos por los cuales hemos luchado y trabajado durante tanto tiempo, pero, sobre todo, se logre llevar el resarcimiento a las víctimas que ya llevan muchos años esperando. Unificar criterios y objetivos frente a la adversidad en que nos encontramos, es un reto y una obligación de quienes nos llamamos defensores de derechos humanos, sea desde la perspectiva indígena, sindical, campesina o de cualquier movimiento social emergente.

Fuente: www.elperiodico.com.gt